Premio
Alejandro Casona de Teatro 2003
Esta
es otra de las obras teatrales que han sido muy importantes en mi trayectoria.
Al mismo tiempo es el texto más duro y comprometido que he escrito porque no
elude la polémica en dos temas tan peliagudos como el terrorismo y la violencia
de género.
Considero que uno de los principales
fines del teatro consiste en sacar a la luz temas que tengan un mayor calado
social, y es un excelente medio para colocar la piedra en el zapato que nos haga
estar incómodos y replantearnos nuestra actitud.
Esta obra nació de una serie de
cuestiones que fui asociando y que se resumían en una pregunta: ¿Qué pasaría si
una víctima del terrorismo hubiera sido un maltratador? A partir de eso imaginé
como escenario la consulta de una psicoanalista encargada de hacer la terapia
de una mujer que ha sufrido la cruel pérdida de su marido, y a lo largo de
varias sesiones se va desvelando que la realidad que tranquiliza la conciencia
de la sociedad no tiene por qué parecerse a lo que realmente ocurrió.
Esta obra se estrenó y se hicieron
varias representaciones en la red de teatros de Castilla La Mancha, y en todas
ocurrió lo mismo, al final de la obra el silencio era estremecedor porque no
ocurría lo que la gente esperaba ver, aunque después aparecían los aplausos por
el enorme trabajo de las actrices.
Por entonces la Diputación de Ciudad
Real se estaba planteando hacer una campaña contra la violencia de género y
habían pensado en una obra que se pudiera representar en buena parte de los
pueblos de la provincia. Vieron la obra y les encantó, pero la consideraban
políticamente incorrecta porque el mensaje que trasmitía era demasiado duro.
Entonces me propusieron hacer una obra con la misma estructura y que la
representaran las mismas actrices, pero que tuviera un mensaje más positivo.
Era la primera vez que hacía una
obra de encargo en la que tendría que plagiarme, aparte de complacer a los
políticos. Fue uno de los trabajos más duros a los que me he enfrentado porque
mi interés estaba puesto en otros temas, pero finalmente escribí en el plazo
pactado Hasta que la vida nos separe,
y todos quedaron contentos. Se hicieron numerosas representaciones y la obra
fue muy bien acogida, incluso conocí a mujeres que se habían sentido
identificadas con lo que contaba. El reto salió bien, pero yo siempre me he
sentido más orgulloso de Terapia, y
sigo pensando que sigue siendo un texto que incita al debate y plenamente actual.
Para conseguirlo en ebook: http://www.amazon.es/Terapia-ebook/dp/B0078ZUZZK/ref=sr_1_18?s=digital-text&ie=UTF8&qid=1347895438&sr=1-18
En edición impresa se encuentra
disponible en el volumen 3 de mi colección Cámara Negra junto a Hasta que la vida nos separe y otros dos
textos: www.ebaobab.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario